Más de un millón de personas participaron en la marcha del Orgullo Gay celebrada en Toronto, ciudad que este año fue también la encargada de celebrar el festival mundial WorldPride, que en 2017 organizará la capital española, Madrid.
La multitudinaria marcha culminó 10 días de celebraciones en la ciudad canadiense que desde principios del siglo XXI se ha convertido en uno de los principales refugios en Norteamérica para la comunidad homosexual en el continente.
La marcha del Día del Orgullo Gay, que este año celebró su 34 aniversario en Toronto, estuvo abierta por el reverendo Brent Hawker, el párroco de la Iglesia Comunitaria de Toronto que en enero de 2001 ofició el primer matrimonio legal en Canadá entre una pareja homosexual.
Entonces, Hawker tuvo que oficiar la ceremonia con un chaleco antibalas bajo la sotana por orden de la Policía de Toronto, que temía que el reverendo fuese atacado tras recibir amenazas de muerte.
Dos años después, el Gobierno canadiense se vio obligado a aceptar los matrimonios homosexuales en todo el país después de que los tribunales de la provincia de Ontario decidiesen que la definición del matrimonio como la unión de un hombre y una mujer era anticonstitucional.
Esta es la primera vez que una ciudad en el continente americano celebra WorldPride, un evento que anteriormente se celebró en Roma (2000), Jerusalén (2006) y Londres (2012).
Como parte de las celebraciones, el jueves, 115 parejas gais, lesbianas, bisexuales y transexuales se casaron en una ceremonia masiva en Toronto para conmemorar que es la primera ciudad norteamericana donde se legalizaron las bodas entre personas del mismo sexo.
Hawker abrió la marcha de decenas de carrozas y más de 12.000 personas, entre los aplausos y los gritos del más de millón de personas que presenciaron el desfile, en un vehículo descapotable y sin chaleco antibalas.
Unas 25.000 personas participan en la celebración del Día del Orgullo Gay
