El superávit comercial japonés se redujo de forma inesperada en el mes de julio debido a que las importaciones crecieron más que las exportaciones (16,8% Vs. 14,2%) y porque el encarecimiento del crudo está incrementando la factura de las compras en el exterior a pesar de que el volumen de las mismas no varie. Así, el saldo positivo fue de 860.000 millones de yenes, un 0,2% peor que los 861.900 millones de un año antes y lejos de la previsión media del mercado (977.100 millones).