
La frustración de los chipriotas ante el anuncio del rescate al país y el respectivo impuesto que deberán abonar los ahorradores se ha hecho patente desde primera hora de la mañana.
"Estoy extremadamente furioso. Trabajé años para tener el dinero y ahora lo estoy perdiendo por decisión de los holandeses y los alemanes", dijo el británico-chipriota Andy Georgiou, de 54 años, quien había vuelto a Chipre a mediados del 2012 con sus ahorros.
"Se llama a Sicilia la isla de la mafia. No es Sicilia, es Chipre. Esto es un robo, en forma simple y sencilla", dijo un jubilado.