El primer ministro británico Gordon Brown y el presidente francés Nicolas Sarkozy instarán esta semana a los bancos a "revelar totalmente y de forma inmediata" las deudas provocadas por la crisis de crédito global. Según han informado responsables británicos, a los dos líderes les preocupa cada vez más que la confianza en los mercados financieros se está viendo mermada por la incertidumbre sobre el alcance de las pérdidas de las entidades financieras, que algunas estimaciones sitúan en hasta 600.000 millones de dólares.
