Air France estudia, entre otros escenarios, la creación de una filial de bajo coste, algo que se podría hacer a partir de su propia compañía turística Transavia, para tratar de hacer frente a la creciente competencia de ese tipo de aerolíneas y reequilibrar sus cuentas, actualmente en números rojos.
El sitio internet de información económica La Tribune publicó hoy esta información, que atribuyó a fuentes internas de Air France, que precisaron que no hay nada decidido y que la nueva filial se justificaría para no afectar a la imagen de marca y de gama alta en la que quiere reforzarse la histórica compañía francesa de bandera.
"Es difícil mantener en la misma marca un producto de gama alta con el 'todo incluido' y una compañía de bajo coste", precisaron las fuentes citadas por La Tribune, que advirtió de que en caso contrario "se destruye la marca".