La polémica en torno a las retribuciones millonarias de los ex directivos de las cajas de ahorros sigue a la orden del día. Esta vez, el protagonista es el exalcalde socialista de León y anterior vicepresidente de Caja España Francisco Fernández, que abandona la entidad a los 56 años con una prejubilación hecha a medida de más de medio millón de euros.
Fernández argumenta que la citada prejubilación se debe a su antigüedad en la entidad, más de 33 años, sin embargo no explica por qué ha tenido ciertos privilegios, como por ejemplo tener preferencia sobre otros trabajadores que, por fecha de nacimiento, podrían haberse prejubilado antes.
Fernández se acogerá, de esta forma, a las mismas condiciones que los sindicatos han pactado para los 825 trabajadores incluidos en el ERE tras la fusión con Caja Duero.
Según explica Fernández, la prejubilación "no tiene ninguna relación" con su condición de directivo de la entidad financiera ni como representante público en la misma, sino "exclusivamente" como trabajador que accedió a la caja con 18 años.
En un comunicado recogido por Europa Press, Fernández insiste en que es un trabajador como cualquier otro, con más de 33 años de antigüedad, y asume las condiciones laborales pactadas en el ERE de su empresa, "exactamente igual que otra persona que se ha prejubilado en Caja España y en Caja Duero".
Según informa este lunes El Mundo, Fernández ya ha percibido recientemente alrededor de 520.000 euros. Pero, además, el exvicepresidente de Caja España se prejubila sin volver a la entidad, ya que en la actualidad se encuentra en excedencia por cargo público.
Fernández, de 56 años de edad, recibirá el 90% del sueldo neto que percibiría hasta cumplir los 64 años. Además, según informa El Mundo, tras las elecciones del 20N podría asegurarse un sueldo de diputado, al contar con posibilidades de lograr un escaño en el Congreso e ir como número dos por el PSOE en León.
Pero la cuestión es que se ha beneficiado de las condiciones pactadas para los empleados incluidos en el ERE, estando al margen del mismo. La entidad no tenía ninguna obligación de concederle las mismas ventajas en su prejubilación, según informan los sindicatos. Por otro lado, hay muchos otros empleados que, según su fecha de nacimiento, podrían haberse prejubilado antes que el exalcalde socialista.
Por su parte, la caja argumenta que los cargos públicos en excedencia deben tener por ley los mismos derechos que los empleados, por lo tanto, a Francisco Fernández no se le puede discriminar con las condiciones para prejubilarse.
Los 520.000 euros es el sueldo que Caja España le garantizó en caso de regresar a la entidad.
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