El plan de austeridad presentado por el nuevo Gobierno portugués del primer ministro socialdemócrata Pedro Passos Coelho ha superado sin dificultad el trámite parlamentario al no encontrar objeciones por parte de la oposición que hicieran necesaria su votación, lo que deja expedito el acceso de Portugal a los 78.000 millones del rescate pactado con la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
De hecho, tras dos días de deliberaciones en el Parlamento de Portugal, ninguna de las fuerzas opositoras a la coalición gobernante de centro derecha (PS, PCP, BE y el Partido Ecologista "Os Verdes") presentaron objeciones al programa, que combina medidas de ajuste del gasto público, subidas de impuestos y privatizaciones.
Así, el nuevo Ejecutivo de centro derecha liderado por Passos Coelho, que cuenta con una cómoda mayoría en la Cámara, culmina con éxito su primera prueba de fuego, después de que el rechazo del programa de ajuste pactado con la 'troika' por el anterior Ejecutivo fuera el detonante de la caída en marzo del Gobierno minoritario encabezado por el socialista José Sócrates.