La agencia de calificación crediticia estadounidense no tiene dudas acerca de cómo procederá en caso de que el Gobierno de Barack Obama no logre respaldo para elevar el techo de la deuda.
Según ha afirmado el presidente de la firma, John Chambers, si esto llegase a pasar, reducirían el rating EEUU al nivel más bajo de su valoración, lo que quiere decir que la calificación actual de 'AAA' será degradada a 'D'.
Sin embargo, Chambers se mostró confiado en que los legisladores demócratas y republicanos alcanzarán un acuerdo para aumentar el límite de deuda de una y evitar que el país pueda incurrir en impago. "Creemos que el techo de la deuda será elevado y que el Gobierno no hará default", declaró en una entrevista a Bloomnberg. "De lo contrario, no habrá rating de triple 'A' para Estados Unidos", añadió.
