La opción de reestructurar la deuda soberana de un estado representa un evento económico y social "dramático" para el país que podría llegar a calificarse de "suicidio político", según Lorenzo Bini Smaghi, miembro del Consejo Ejecutivo del Banco Central Europeo.
"Arrastra a muchos a la pobreza, como la experiencia ha demostrado", afirmó el ejecutivo italiano del BCE en una conferencia pronunciada en Florencia.
En su discurso, Bini Smaghi alertó contra la "ilusión cada vez más extendida entre los legisladores europeos" de que la gobernanza económica de la eurozona se puede fortalecer delegando en los mercados fianncieros la selección de las políticas adecuadas, especialmente en materia presupuestaria, en vez de incrementando las responsabilidades de las instituciones".
Además, considera "un error" establecer condiciones explícitas para que países y empresas puedan reestructurar sus obligaciones con la excusa "razonable y justa a primera vista" de que los inversores soporten las consecuencias de sus decisiones.