El Gobierno brasileño anunció hoy que anticipará su próxima campaña de desarme de la población civil, debido al asesinato de doce niños en una escuela de Río de Janeiro perpetrado por un exalumno la semana pasada.
El ministro de Justicia, José Eduardo Cardozo, afirmó que la campaña, en la que se incentivará a los ciudadanos a entregar a las autoridades las armas de fuego que tengan en su poder, comenzará previsiblemente en la primera semana de mayo.
"Está demostrado que cuando se realizan estas campañas, hay una reducción muy fuerte en la mortalidad, que baja más del 50 % en Brasil", dijo el ministro a periodistas, después de reunirse con representantes de varias ONG con los que debatió sobre los preparativos de la campaña.