El grupo industrial burgalés prevé cerrar el ejercicio 2007 con un beneficio neto de 4,1 millones de euros frente a las pérdidas de 2,6 millones de euros registradas en 2006. En una presentación remitida a la CNMV, el fabricante de fresadoras atribuyó esta mejora a sinergias procedentes de su fusión con Industrias Anayak, que se hizo efectiva en enero de 2006, y a una demanda creciente en el mercado de maquinaria. Además, Nicolás Correa prevé que su facturación crezca un 38% a final de año, hasta 87 millones de euros, y que el resultado bruto de explotación (EBITDA) se sitúe en 5,3 millones de euros frente a los 0,3 millones de 2006. Las estimaciones para 2008 apuntan a unas ventas de 115 millones de euros, un EBITDA de 9 millones y un resultado neto de 8,1 millones.