La masa monetaria en circulación en la eurozona, medido por el agregado M3, aumentó un 11,7% en julio en términos interanuales, frente al crecimiento del 10,9% registrado en junio, según ha anunciado hoy el Banco Central Europeo (BCE). El incremento es siete décimas más alto de lo previsto por los analistas. La media trimestral en un plazo de un año se situó en el 11,1% contra el 10,6% de junio. El M3 es un indicador que sigue con atención el Banco Central Europeo (BCE) para llevar a cabo su política monetaria ya que el crecimiento de la liquidez es considerado como un factor que empuja al alza al IPC. Especialmente clave será el dato de agosto después de que la entidad inyectara más de 251.365 millones de euros adicionales en los mercados para paliar los efectos de la falta de liquidez generada por la crisis hipotecaria y crediticia en Estados Unidos, que ha afectado seriamente a varios bancos europeos.