FCC ha entrado en Chile con su negocio de agua, al adjudicarse el contrato de diseño y suministro de equipos de una planta desaladora al Norte del país por un importe de 20 millones de dólares (unos 17 millones de euros), según informó el grupo.
Chile se convierte así en el decimoquinto país en el que la compañía controlada por Esther Koplowitz posiciona su actividad de agua, en el marco de la estrategia de internacionalización del grupo.
Con la entrada de Aqualia en el país latinoamericano, la filial de agua de FCC se posiciona en un mercado que considera presenta un "gran desarrollo a corto y medio plazo".