La temporada invernal en Latinoamérica ha dejado al menos 225 muertos y miles de personas afectadas, debido a la ola de frío que se extiende por el Cono Sur y a la onda tropical que atraviesa varios países de Centroamérica, el Caribe y el norte de Sudamérica.
Las malas condiciones climáticas en el continente han obligado a varios gobiernos a declarar alertas de emergencia y a tomar medidas como la suspensión de clases en Bolivia, Paraguay y Argentina, así como la evacuación de los afectados hacia albergues o refugios temporales.
El mayor número de víctimas mortales por la ola de frío en el Cono Sur se registró en Bolivia, con 25 personas fallecidas, en su mayoría indigentes que fallecieron por hipotermia en las últimas semanas en cuatro de las nueve regiones, y dos víctimas intoxicadas por inhalar monóxido de carbono, en la región de Tarija (sur).