
El nuevo Gobierno húngaro se ha comprometido ante la Comisión Europea a cumplir el objetivo de reducir su déficit público hasta el 3,8% del PIB en 2010 y a aplicar todas las medidas de ajuste necesarias para lograr este objetivo, según ha anunciado hoy miércoles el Ejecutivo comunitario.
Las autoridades húngaras desataron la semana pasada el temor de los mercados a una repetición de la crisis de deuda griega al asegurar que el anterior Gobierno había falseado los datos presupuestarios pese a estar recibiendo ya ayuda de Bruselas y del Fondo Monetario Internacional (FMI) desde 2008.
El nuevo Ejecutivo se ha visto obligado a rectificar sus acusaciones, mientras que la UE ha asegurado que los rumores de una posible quiebra de Hungría eran "salvajemente exagerados".