El nuevo primer ministro húngaro, Victor Orban, ha anunciado las directrices de su programa económico tras advertir el pasado viernes de que la situación del país era grave.
Según indicó, se impondrá una tasa de carácter temporal a los bancos y aseguradoras que entrará en vigor este año y con el que el Ejecutivo húngaro pretende recaudar 200.000 millones de florines al año (701 millones de euros).
Además, se reducirá el impuesto de sociedades hasta el 10% para aquellas empresas cuyos beneficios sean inferiores a 500 millones de florines (1,8 millones de euros). Otra de las medidas anunciadas es la introducción en un plazo de dos años de un tramo único del 16% en el impuesto sobre la renta.