La Unión Europea revisará los presupuestos nacionales de los Estados miembros antes de su aprobación parlamentaria para verificar que las hipótesis de crecimiento e inflación en que se basan son realistas y evitar así que se repitan crisis de déficit y deuda como la de Grecia, según el acuerdo preliminar alcanzado hoy por los ministros de Economía de los Veintisiete.
Cada primavera, los Gobiernos deberán presentar sus planes presupuestarios a la Comisión y al resto de Estados miembros. "No se trata de verificarlos en detalle o de que sean decididos por las instituciones europeas. Esto es una prerrogativa de los parlamentos nacionales", dijo el presidente permanente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, al término de la reunión.
La UE se limitará a examinar las principales hipótesis que sostienen las cuentas públicas, como la previsión de crecimiento o inflación, así como los principales agregados, como el total de ingresos y de gastos y los objetivos de déficit. "Un Gobierno que presente un plan presupuestario con un alto déficit tendrá que justificarse ante sus pares, los ministros de Economía", destacó Van Rompuy. Y al ser en primavera, "todavía habrá tiempo para ajustar los planes antes de que se presente el presupuesto final".