Cada vez que Tiger Woods golpea a un aficionado con una bola trata de compensarlo regalándole un guante de golf autografiado; el domingo se estaba quedando sin guantes en el Torneo Memorial. Seguir leyendo el arículo
"No es broma, hoy estuve golpeando a todo el mundo", dijo Woods sonriendo abiertamente. "Gracias a Dios los obtengo gratis (los guantes)", agregó.
En su primer golpe en el hoyo uno, Woods envió la bola hacia la izquierda del fairway y golpeó en el cuello a Jeramy May, de 37 años. "Estoy contento de que ellas estaban en el otro lado", comentó May señalando a su hija y una amiga.