Hungría ha pasado el primer plano de la actualidad, con los CDS disparados después de que un portavoz del primer ministro reconociera que la economía "está una situación grave" y que "no es una exageración hablar de default".
Mientras, el florín húngaro cae a mínimos de un año frente al euro, que por otro lado sigue mostrando su debilidad.
En otoño de 2008, el FMI y la Unión Europea ya salieron al rescate de Hungría con un plan de casi 20.000 millones de euros.