El consejero del BCE, Axel Weber, ha justificado hoy el programa de rescate a Grecia ante el Parlamento germano alegando que existe un riesgo de "grave contagio" a otros países comunitarios.
"Existe la amenaza de un grave efecto de contagio para otros miembros de la eurozona y el aumento del efecto negativo de retroalimentación en los mercados de capitales", afirmó Weber, quien añadió que Atenas "es incapaz por sí sola de salir de la crisis".
Según explicó, el programa de rescate supone la única "opción razonable" ante las circunstancias "excepcionales" existentes para proteger la estabilidad de la eurozona. "El default de Grecia en la actual situación de fragilidad supondría un sustancial riesgo para la estabilidad de la unión monetaria y el sistema financiero", añadió.