El Gobierno indio ha aprobado hoy una inyección de capital en la banca pública por importe de 150.000 millones de rupias (unos 2.424 millones de euros) durante el presente año fiscal -que comenzó elpasado 1 de abril-, y autorizó otra para el próximo ejercicio.
En un comunicado, el Ejecutivo explica que el objetivo de esta inyección de capital es conseguir que los bancos públicos mantengan un mínimo del 8% de reservas para protegerse de eventuales pérdidas.
Además, espera que con esta medida los bancos aumenten su capacidad de crédito, lo que beneficiará a sectores generadores de empleo como el agrícola, la pequeña y mediana empresa y el exportador, según el Gobierno.