La entidad financiera obtuvo un beneficio de 14,6 millones de euros en 2009, una cifra que supone una caída del 60,1% respecto a 2008, debido a la actual situación económica, la problemática del sector inmobiliario y los recursos que se han destinado desde la entidad a cubrir la morosidad.
En 2009 destinó provisiones superiores a los 140 millones de euros para afrontar los futuros impagos, mientras que la morosidad se situó en el 4,39%, respecto al 4,17% del 2008, lo que supone un ligero ascenso respecto al año anterior y queda por debajo de la media del sector financiero español.
Los activos totales gestionados por el Grup Caixa Tarragona se situaron en 10.964 millones de euros, con una disminución del 5,1%. Por lo que respecta al crédito, que representa más de un 60% del balance, el decrecimiento fue del 8,21%.