El Gobierno islandés propuso hoy celebrar un referéndum el próximo 20 de febrero para que los ciudadanos de este país decidan si aceptan o no reembolsar los depósitos bancarios que británicos y holandeses perdieron al quebrar la entidad Icesave.
El Parlamento islandés aprobó a finales del año pasado un proyecto de ley para materializar el desembolso de los depósitos, valorados en más de 5.000 millones de dólares.
Sin embargo, el presidente del país, Olafur Grimsson, aclaró este martes que no firmará el proyecto de ley para evitar indemnizar a los ahorradores e inversores británicos y holandeses afectados por la quiebra de la entidad Icesave en 2008, decisión que obliga a someter el texto a referéndum.