Nueva vuelta de tuerca en el melodrama sobre la renovación de la flota de aviones cisterna del Departamento de Defensa de Estados Unidos. A última hora de hoy, con los mercados ya cerrados, Northrop Grumman informó al secretario de Defensa, Robert Gibbs, que no presentará una oferta contre Boeing a no ser que se realicen cambios en las condiciones del concurso.
Wes Bush, presidente de Northrop, con sede en Los Ángeles, dejó claro en una misiva dirigida a Gibbs que ?no puede presentar una propuesta? bajo las condiciones actuales. ?Debo mostrarle mi arrepentimiento que ante la falta de respuesta a los cambios sugeridos en la propuesta final, Northrop Grumman ha determinado que no puede ofrecer ningún proyecto a su departamento para la fabricación del KC-X?, añadió.
Esta decisión pone la guinda a un concurso rodeado de escándalos y polémicas. Northrop, que proponía fabricar los aviones en la ciudad de Mobile, ganó el contrato valorado en 40.000 millones de dólares el año pasado. Sin embargo, su principal oponente, Boeing, presentó una queja que fue respaldada por varios auditores federales, algo que provocó que Gibbs tuviera que reconvocar el concurso. El pasado 24 de septiembre, el Pentágono presentó las nuevas reglas de esta particular carrera que, según Northrop, beneficiaban enormemente al modelo KC-767 propuesto por Boeing. El proyecto de Northrop está inspirado en el Airbus A330.