El Banco Mundial (BM) elevó hoy su previsión de crecimiento anual de China hasta el 8,4 por ciento en 2009, gracias al impacto positivo del plan de estímulo fiscal y monetario lanzado por el Gobierno chino, según el último informe de la institución.
El economista Louis Kuijs, autor del informe, aseguró hoy ante la prensa que este pronóstico, sumado al anuncio oficial de Pekín de que el Producto Interior Bruto (PIB) se situó en el 8,9 por ciento en el tercer trimestre, confirman "la consolidación de la recuperación de China".
Para el BM, la clave residió en el plan de estímulo por 585.000 millones de dólares, que permitió que la demanda doméstica china se disparase un 12 por ciento y compensara la caída de las exportaciones, tradicional locomotora de la tercera potencia económica mundial.