El gobierno estadounidense estudia otras soluciones para desplegar un escudo antimisiles en Europa, que no impliquen necesariamente la utilización de bases en Polonia y República Checa, infomó el sábado el periódico New York Times.
Este cambio sería bien recibido por Rusia y Alemania pero podría disgustar a ciertos aliados de Estados Unidos en Europa, informó el periódico citando sin identificar a funcionarios del gobierno de Estados Unidos.
El gobierno del presidente Barack Obama espera terminar su revisión del proyecto del escudo antimisiles el mes próximo, lo que daría a Obama la oportunidad de hablar con su par ruso, Dimitri Medvedev, durante la Asamblea General de la ONU a fines de setiembre, según estas fuentes.