El IPC se situará en una tasa negativa del 0,2% de media en 2009 y retornará a valores positivos del 1,8% en 2010, tras cerrar el mes de julio con un descenso del 1,4%, según las previsiones actualizadas del Instituto Flores de Lemus.
La institución indicó en un comunicado que se sigue produciendo un "intenso ajuste" de los precios, aunque "no se considera apreciable el riesgo de que la economía se vea atrapada en un largo periodo deflacionista".
A su juicio, en este contexto, "se espera que la fase de debilidad de los precios siga hasta principios de 2010". La razón es que los precios energéticos, que están detrás de las últimas caídas del IPC, moderarán su retroceso, de forma que en diciembre de este año podrían volver a niveles positivos.