El antiguo presidente de Enron, la petrolera que protagonizó uno de los mayores escándalos corporativos de la historia de Estados Unidos, comparece hoy ante los tribunales, después de haber apelado la sentencia que lo condenaba a 24 años de prisión por fraude.
Jeffrey Skilling, de 55 años, lleva tres en una cárcel de Colorado por engañar a los accionistas y empleados de Enron, después de que se desmontara el castillo de naipes que convirtió a una modesta compañía en la séptima más grande del país, con una capitalización de 68.000 millones de dólares.
Según la corte de apelación, el juez que llevó el caso en primera instancia, Sim Lake, falló al asegurar que el antiguo presidente de la petrolera puso en peligro la salud financiera de Enron, cargo que aumenta considerablemente la pena. La revisión del caso puede hacer que la condena de Skilling se reduzca a 15 años.
