El presidente Barack Obama propuso el martes al Congreso la creación de un organismo que vigile la letra pequeña de productos como tarjetas de crédito e hipotecas, y determine qué comisiones, sanciones y tasas de interés son justas.
La Agencia de Protección Financiera del Consumidor se encargará de regular esos productos, una exigencia de los estadounidenses, según Obama. "Esos contratos ridículos con páginas de letra pequeña que nadie puede entender serán cosa del pasado", dijo el presidente. "Y la aplicación de la ley será la regla, no la excepción".
La agencia forma parte de un plan más amplio de Obama para fortalecer la supervisión del sector financiero y eliminar las lagunas regulatorias que son mencionadas como uno de los causantes de la crisis económica.
La agencia tendría la misión de proteger a los consumidores en la adquisición de hipotecas y el uso de tarjetas de crédito, entre otros. También examinará los términos impuestos en las cuentas de ahorro, de cheques y de tarjetas de débito.
