El estado de New Hampshire se convirtió ayer en el sexto de Estados Unidos en autorizar los matrimonios entre personas del mismo sexo, después de que el gobernador John Lynch diese la rúbrica definitiva a un proyecto aprobado previamente en la Cámara de Representantes y el Senado estatales.
El proyecto de ley recibió la luz verde de la Cámara de Representantes por 198 votos a favor y 176 en contra, horas después de que en el Senado 14 legisladores diesen el 'sí' y tan sólo una decena rechazase la iniciativa.
"Hoy, estamos defendiendo las libertades de las parejas del mismo sexo para hacer posible que tengan los mismos derechos, responsabilidades, y respeto bajo la ley de New Hampshire", afirmó Lynch en un comunicado. La ley reconocerá a partir de ahora los matrimonios y uniones civiles realizados por homosexuales en otros estados, y las personas que hayan contraído una unión civil en los últimos años quedarán formalmente casados a partir de 2011.