Pirelli ha informado al comité de empresa de Manresa (Barcelona) de que presentará el ya anunciado Expediente de Regulación de Empleo (ERE) entre el 10 y el 15 de junio, una medida que afectará a 500 trabajadores, después de que la compañía desvelara en febrero su intención de abandonar la producción de neumáticos en la planta. Los sindicatos buscan rebajar la cifra a través de un plan de bajas voluntarias.
El responsable de Recursos Humanos del grupo en Europa, Fabrizio Rutchsmann, se ha reunido con el comité de Manresa y ha confirmado que la voluntad de Pirelli es que el primer grueso de trabajadores abandone la fábrica en octubre. Un segundo grupo saldría en diciembre y los últimos 40 empleados en el primer trimestre de 2010, según informaron fuentes sindicales.
El comité propuso a la compañía que no haya despidos hasta 2010, en vistas a que "mejore" la situación económica y las posibilidades de recolocación de los empleados. A cambio, ofreció la posibilidad de aplicar un ERE de suspensión temporal rotatorio "para poder alargar la situación hasta enero". Además, exigieron abrir un periodo de bajas voluntarias hasta la presentación del ERE.