China consolidó su lugar como primer acreedor de Estados Unidos, con inversiones públicas y privadas por 739.600 millones de dólares en títulos del Tesoro estadounidense a fines de enero, contra 727.400 millones un mes antes, según cifras del gobierno norteamericano.
Estas cifras fueron divulgadas unos días después de que el primer ministro chino Wen Jiabao expresara su inquietud por las inversiones de su país ante el creciente déficit presupuestario estadounidense.
La deuda norteamericana en manos de China, que equivalía a 492.600 millones de dólares en bonos del Tesoro en enero de 2008, aumentó un poco más de 50% en un año, con la mayor parte de ese incremento registrado en septiembre y octubre pasado.