Ono registró unas pérdidas netas en 2008 de 26 millones de euros, lo que representa un 87% menos que en el ejercicio anterior (201 millones), según datos publicados hoy por la compañía.
Asimismo, la operadora incrementó un 10,6% su beneficio operativo (EBITDA) durante el año pasado, hasta alcanzar los 703 millones de euros. Esta cifra permite a la empresa alcanzar un margen del 44%, frente al 39% del año anterior.
En cuanto a los ingresos, ONO cerró el año con una facturación de 1.603 millones de euros, un 0,8% menos que en 2007. Por otro lado, la operadora acabó 2008 con un total de 1.853.000 clientes, lo que representa una caída del 0,3% respecto al año anterior.