
Yo no sé si los señores diputados de los "constitucionalistas" PP, PSOE y C's e integrantes de la Mesa del Congreso, saben exactamente la imagen de monarquía parlamentaria bananera que han transmitido al mundo. Han votado en contra de la toma en consideración de unas iniciativas parlamentarias de Unidos Podemos bajo el formato de pregunta a la ministra de Hacienda.
Igualmente, la Mesa rechazó la creación de una Comisión de Investigación a fin de esclarecer, debatir y resolver el respaldo oficial del Gobierno de Rodríguez Zapatero a la entrevista entre el Gobierno Saudí y la representante oficial del monarca entonces reinante, Juan Carlos I, la anteriormente citada, Corinna. ¿Cuáles han sido los argumentos para negarse?
El primero ha consistido en recordar la inviolabilidad del Rey entonces reinante. Y el segundo ha consistido en afirmar que el Parlamento no puede controlar ni tampoco opinar sobre un Gobierno que ya no gobierna.
La inviolabilidad del Rey es uno de los artículos más infames de la Constitución española y además totalmente contradictorio con el artículo 14 de la misma. ¿Son los partidos autocalificados de constitucionales partidarios de abolir dicho artículo en una hipotética reforma constitucional? ¿Seguirán manteniendo esta servidumbre que permite la impunidad a presuntos delincuentes? ¿De verdad han asumido el concepto de la Soberanía Nacional ínsita en el Parlamento? ¿Creen que representan así la democracia parlamentaria?
Creo que los señores diputados, y en consecuencia sus partidos, no hubiesen desaprovechado la ocasión de atacar a los otros, y a los gobiernos que sostuvieron, si el asunto de Corinna y la monarquía saudí no tuviera como protagonista a Juan Carlos de Borbón. El argumento usado para inhibirse insulta a la inteligencia y es totalmente contrario a la memoria política.
Decía Castelar que España, a fuer de repetirse, había cansado a la Historia. Con el calificativo de serviles fueron denominados los diputados de las Cortes de Cádiz que defendían los privilegios de la monarquía absoluta y que con posterioridad en 1814 firmaron el Manifiesto de los Persas, pidiendo la vuelta al absolutismo de Fernando VII.
El servilismo actualizado no sólo impide para ciertos casos el curso de la Ley sino que, además, sigue manteniendo la corrupción como una segunda naturaleza del Estado. ¿Qué diferencias existen entre estas actuaciones parlamentarias y las que atribuimos a las llamadas Repúblicas bananeras?