
Ahora que tanto el Gobierno como los empresarios bendicen la contratación a tiempo parcial, que consideran una especie de bálsamo de Fierabrás para remediar los quebrantos del empleo, conviene matizar también que el incremento de esta modalidad laboral en nuestro país es una de las causas esenciales que han distorsionado a la baja la evolución estadística de los costes salariales. La CEOE propondrá subidas salariales en torno al 1% para el año próximo.
De hecho, un reciente estudio de la CEOE constata que los ocupados a tiempo parcial en España han pasado de representar en torno al 10% del total en 2010, a un 16,2% en el primer trimestre de 2014. Incremento que presiona el crecimiento de los costes salariales a la baja, tanto por la menor retribución derivada del menor número de horas trabajadas, como por el mayor coste salarial por hora de los trabajadores a jornada completa.
Este hecho explicaría, en opinión de los técnicos de la patronal, avalada por expertos y estudiosos del mercado laboral, la contradicción existente entre las tasas de crecimiento negativas de los costes salariales medios en el año 2013, mientras que los costes salariales de los trabajadores con jornada completa y a tiempo parcial registraban incrementos del 1 y el 1,5%, respectivamente.
Contención de salarios
La constatación de esta distorsión estadística no debe, sin embargo, servir de excusa para aferrarse a una política de contención de los salarios. La negociación colectiva que se anuncia debe tener muy en cuenta que el concepto de moderación salarial no es equivalente al de contracción o rebaja de las retribuciones de los trabajadores.
El colectivo de los asalariados ha sido, junto al de los autónomos y pequeños empresarios, el que ha soportado todo el sacrificio de una crisis que ellos no habían generado, esquilmados además por una presión fiscal rayana en lo confiscatorio. Por eso, ahora que parece que asoman 'brotes verdes', empecinarse en bajar los salarios y seguir reduciendo el poder adquisitivo de las familias es poner palos en las ruedas de una recuperación, que sólo puede venir de la mano del consumo.