Evasión

Tomates secos caseros: la receta más fácil para vagos con buen gusto que saben ahorrar

iStock

En la cocina hay muchas maneras de ahorrar: planificando las comidas de la semana, aprovechando ingredientes en distintas recetas y preparando tu mismo aquellos más caros. esta última puede parecer una tarea cansada y tediosa, pero no es así en el caso de los tomates secos caseros.

Este ingrediente gourmet que queda perfecto en pastas, ensaladas, focaccias o salsas puede costar cerca de los 20 euros el kilo. Sin embargo, con esta receta pensada para aquellas personas que no tienen mucho tiempo, o directamente no les gusta cocinar, se podrá preparar unos tomates secos de gran calidad.

Los tomates secos son un producto saciante que tiene muchos beneficios para la salud como:

  • Es un antioxidante natural. Gracias al licopeno se combate el envejecimiento celular, protege la piel del sol y reduce el riesgo de ciertos tipo de cáncer.
  • Salud cardiovascular. El potasio mejora la salud del corazón y ayuda a regular la presión arterial.
  • Fuente de hierro vegetal. Aquellas personas con déficit o que han decidido tener una dieta vegetariana pueden encontrar en el tomate seco el aliado perfecto para prevenir la anemia.

Ingredientes

  • 1 kg de tomates
  • Sal gruesa o sal marina
  • Azúcar (opcional)
  • Orégano seco (opcional)
  • Ajo en polvo o fresco (opcional)
  • Aceite de oliva (para conservar, opcional pero recomendado)

Paso a paso para los tomates secos

El proceso para conseguir tomates secos conlleva deshidratarlos, pero para conseguir un resultado igualmente notable sin tanto tiempo basta con hacer uso del horno.

  1. Lo primero es lavar muy bien los tomates y cortarlo a lo largo por la mitad, aunque si son muy grandes se pueden cortar en cuartos.
  2. Retira las semillas con una cuchara para que se sequen más rápido y preparalos con la piel hacia abajo en una bandeja de horno forrada.
  3. Sazona. Ve espolvoreando sobre los tomates la sal gruesa para que se deshidrate mejor, un toque de azúcar para corregir la acidez, orégano seco y ajo en polvo.
  4. Llevalos al horno precalentado a 100ºC y cocinar unas cuatro horas. En caso de que se quieran semisecos 140ºC durante una hora. Cada hora abre la puerta del horno para que salga la humedad.
  5. Estarán listos cuando se vean arrugas pero permanezcan aún flexibles.

Cuando se haya terminado el proceso guárdalos en frascos con ajo, hierbas como el romero o el laurel y cubrelos con aceite de oliva. Guardalos en la nevera y así conseguirás también un aceite muy aromatizante.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky