A nadie le sorprende que las patatas sean uno de los mejores acompañamientos, pues combinan a la perfección con una multitud de comidas y existen diversas formas de prepararlas. Entre ellas, una de las más recurrentes son las patatas fritas, una guarnición muy fácil de preparar y sabrosa. No obstante, hay ocasiones en las que no disponemos del tiempo suficiente para pelar y cortar las patatas y, entonces, las congeladas se convierten en la solución perfecta.
Eso sí, a pesar de ser un recurso bastante rápido y resolutivo, hay un gran inconveniente que echa para atrás a más de uno: tienden a ablandarse cuando se cocinan. Por suerte, conseguir que queden crujientes y doradas es posible, tan solo hay que evitar cometer este error.
El paso a paso para unas patatas fritas perfectas
El chef británico David Nayfield del restaurante Che Figo ha confesado cuál es el método que siguen en su cocina para conseguir unas patatas fritas perfectas, incluso cuando son congeladas. Tan solo hay que evitar cometer este "error fatal". Para él, sobrecargar las bandejas del horno, la airfryer o la sartén es el principal factor por el que no quedan con la textura deseada, pues apenas tienen espacio para que queden lo suficiente crujientes.
Explica que, en lugar de freírse, cuando hay demasiadas patatas y el espacio espacio escasea, se acaban cocinando al vapor, evitando que se doren.
Junto a ello, otro factor que también es importante considerar es precalentar el electrodoméstico o el aceite en el que se vayan a preparar antes de cocinarlas. El chef añade que meterlas en frío aumenta las posibilidades de una cocción desigual, sobre todo si estamos hablando de patatas congeladas.