
El primer ministro de Italia, Enrico Letta, ha advertido a sus socios de centro derecha en la coalición de Gobierno que hagan todo lo posible para no inflamar la tensa relación entre los diferentes partidos a raíz de los ataques verbales emitidos por el ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi contra el poder Judicial.
Durante un mítin en Brescia, Berlusconi acusó a los jueces de querer eliminarle políticamente después de que su apelación contra una condena de cuatro años de cárcel por fraude de impuestos fuera rechazada la semana pasada.
El mítin contó con la presencia del ministro del Interior, Enrico Letta, secretario general del partido del ex primer ministro, el Pueblo de la Libertad, lo que ha desatado la ira del nuevo jefe del Ejecutivo.
"Eventos como el de Brescia son inaceptables y no deben repetirse porque los efectos negativos podrían destruir la capacidad del Gobierno para seguir unido", advirtió el portavoz de Letta, Gianmarco Trevisi. "Letta ha reiterado que no está dispuesto a mantener el Gobierno a toda costa", indicó el portavoz.