Molinero Logística nació en los años 50 como transportista local de la mano de Industrias Revilla y debe su nombre al lugar de nacimiento de su fundador.
Javier Jiménez tomó las riendas de la empresa en 1994 de manos de su padre y ha conseguido hacer crecer su plantilla de los 20 trabajadores iniciales a las 550 personas que hoy la componen.
Javier define a su empresa "como una partida de ajedrez que me he marcado", haciendo su jugada contra la competencia, los costes derivados de los crecientes impuestos a los hidrocarburos o la formación continua necesaria para continuar adelante.
