
La fiesta valenciana por excelencia abre sus puertas la próxima semana del 15 de marzo. Y para que no te las pierdas Guía Repsol ha elaborado un magnífico manual.
Las Fallas se celebran como conmemoración a San José y son famosas en el mundo entero por su espectáculo de fuego, llamas, color y pirotecnia.
Los ninots se apoderan de las calles de la capital valenciana. Unos colosos cuyo resultado albergan el trabajo de los artesanos de todo un año. La temática suele girar en torno a temas de actualidad, lo que supone que, en ocasiones, puedan verse sometidos a cierta censura.
Pintores, escultores, artesanos y otros profesionales son los encargados de modelar a los protagonistas de las fallas. Al final de las fiestas todos serán reducidos a cenizas, con la excepción del ninot ganador que pasará a formar parte del Museo Fallero.
Origen de la festividad
Las fallas están declaradas de Interés Turístico Internacional y su origen se remonta a principios del siglo XVIII. Cuenta la leyenda que los carpinteros de Valencia, con la llegada de la primavera, quemaban sus parots- estructuras de madera sobre las que colgaban los candiles-, porque ya no les resultaban útiles.
Para evitar que la celebración constituyera un acto pagano, se hizo coincidir la fecha con la festividad de San José.
Con el paso de los años, comenzaron a ornamentar estas estructuras con ropas que recordasen a la figura humana, así nacieron los ninots.
Posteriormente, los aldeanos comenzaron a crear monumentos con varios muñecos, de las telas y ceras al cartón piedra del siglo XX, hasta el poliexpán de la actualidad.
Mascletà y cremà
La festividad comienza con la Cridà. Desde las Torres de Serranos, el Alcalde y las Falleras Mayores de ese año invitan a los asistentes a disfrutar de las fiestas. No obstante, las tan populares mascletàs- espectáculo pirotécnico de petardos y fuegos artificiales- comienzan a principio de mes.
El día 18 cada comisión fallera deposita ramos de flores en el muro de la basílica de la Virgen de los Desamparados, patrona de Valencia. Los asistentes lucen los trajes tradicionales y desfilan con bandas de música. Todas las falleras ofrecen sus ramos a la virgen, siendo la última en hacerlo la Fallera Mayor de Valencia.
Al día siguiente, el 19 de marzo, tienen lugar la despertá o diana y al mediodía la mascletà principal, uno de los mayores espectáculos pirotécnicos que ver, escuchar y sentir. Con la noche llega la cremá, es el momento de disfrutar viendo como la avidez de las llamas devora a los ninots.