Cuba en la hora decisiva de la suceción de Fidel Castro

El Parlamento de Cuba elegirá el domingo al reemplazo de Fidel Castro, probablemente su hermano Raúl Castro, en una histórica sesión que se realiza en medio de llamados a la unidad, cinco días después de que el líder renunciara a la reelección presidencial.

Es una "decisión trascendente" de los diputados, dijo Fidel en un artículo publicado este sábado, en el cual se mofa de la Organización de Estados Americanos (OEA) y le llama "el basurero".

La reunión, que comenzará a las 10H00 locales (15H00 GMT), instalará a la Asamblea Nacional electa en comicios en enero, de 614 diputados -entre ellos los Castro-, quienes escogerán al jefe de Estado y de Gobierno.

En otro artículo, publicado el viernes, Fidel se dijo "enfrascado por hacer constar mi voto unido (por todos)" en los comicios parlamentarios del domingo, un llamado a la unidad que se suma a anteriores hechos por otros dirigentes.

Fidel, de 81 años y con casi medio siglo en el poder, anunció el pasado martes que no aspirará a la reelección como presidente, al admitir en un mensaje que no estaba "en condiciones físicas" de asumir un cargo "que requiere movilidad y entrega total".

Según lo esperado, Raúl, de 76 años, será designado como presidente del Consejo de Estado -Ejecutivo-, luego de 19 meses de haber asumido de forma provisional el mando que le transfirió su hermano el 31 de julio de 2006 al caer gravemente enfermo.

Sin embargo, no se descartan sorpresas como podría ser la designación del vicepresidente Carlos Lage, de 56 años, dando paso formal a una nueva generación de dirigentes al frente de la revolución.

Además del presidente, también cabeza del gabinete de ministros, los diputados elegirán en voto directo y secreto al primer vicepresidente, cinco vicepresidentes, un secretario y 23 miembros del Consejo de Estado.

En el artículo del viernes, primero tras el mensaje de su renuncia, el líder cubano admitió que su retiro marca "el fin de una etapa", pero descartó cambios en el sistema político.

En ese editorial, Castro comentó que "los días de tensión" a la espera de este domingo lo dejaron exhausto.

La renuncia de Castro obliga a un reacomodo en las cúpulas de gobierno y militar, debido a que Raúl -hasta ahora primer vicepresidente- asumiría en su calidad de presidente como "Jefe Supremo" de las fuerzas militares, dejando vacante el Ministerio de Defensa.

Además, según lo que se espera, Lage, de la generación intermedia de la revolución, ascendería a primer vicepresidente y sería, constitucionalmente, el sucesor de Raúl.

Cualquiera que resulte presidente deberá afianzar un gobierno colegiado, en una etapa compleja que obliga a sustituir el liderazgo unipersonal y preparar la transición generacional.

La elección se realiza en una expectativa sin precedentes en la población, además de por la definición del nuevo presidente, por "cambios" que prometió Raúl para aliviar los problemas económicos y sociales, y por sus críticas al "exceso de prohibiciones".

"Yo estoy muy inquieta. A mi me pareció increíble que Fidel renunciara, pero ahora vamos a ver qué viene, porque ya está bueno ya... queremos ver qué es lo que Raúl va a hacer", comentó una joven empleada de una oficina de turismo de La Habana Vieja.

El mandatario interino dejó claro que todo lo hará "dentro del socialismo" y que las soluciones serán "poco a poco", un proceso en el que, según analistas, Fidel seguirá teniendo fuerte influencia desde su estratégica posición de secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC).

Raúl comanda desde 1959 las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), con un enorme poder en sectores estratégicos de la economía y fuerte influencia política dentro de la estructura de poder.

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