
Las negociaciones de los socios comunitarios alrededor de la próxima normativa europea sobre eficiencia energética están rebajando sensiblemente las exigencias del texto propuesto en noviembre por la Comisión Europea. Entre otros cambios, el objetivo de alcanzar un 30% de ahorro energético a 2030 ya no será vinculante, es decir, sometido a sanciones por incumplimiento.
La Comisión presentó el 30 de noviembre un Paquete de propuestas regulatorias bajo el epígrafe Energía limpia para todos los europeos, diseñado para avanzar en el proceso de descarbonización de la economía durante la próxima década. Conocido en el sector como Winter Package, incluye una reforma de las directivas de eficiencia energética y de eficiencia energética en los edificios que debería impulsar el PIB comunitario en 70.000 millones de euros anuales y crear 400.000 empleos nuevos.
Los socios europeos, como es habitual, desconfían de los poderes que Bruselas quiere otorgarse y están revisando con lupa sus propuestas. Por ejemplo, reclaman que se detalle en qué consistirá la evaluación de la eficiencia de un edificio que habrá que realizar cuando se modifique su instalación técnica, es decir, desde la calefacción hasta los puntos de recarga de vehículos eléctricos, pasando por los elementos de control o las instalaciones de autoconsumo.
Indicador de la inteligencia de los edificios
Igualmente, la Comisión quiere establecer la definición, mediante un delegado, de un nuevo indicador de la inteligencia de los edificios, y los Estados quieren tenerlo controlado. Pero donde más se nota el tira y afloja entre las naciones y Bruselas es en el objetivo de ahorro de energía: en su propuesta, la Comisión planteaba el objetivo vinculante de reducir del 30% del consumo energético comunitario en 2030. Sin embargo, los estados ya han decidido eliminar esa obligación -que implicaba afrontar sanciones por incumplimiento- y devolver el objetivo a la categoría de indicativo que ya tuvo en las primeros propuestas, antes del trabajo del equipo de Jean Claude Juncker, en las que se proponía un ahorro del 27% del consumo.
Este cambio ya se recoge en los últimos borradores de la normativa, según reveló ayer María Teresa Velasco, subdirectora general de Planificación Energética y Seguimiento del Ministerio de Energía, en unas jornadas organizadas por Enerclub.
Durante el acto también se reveló que otras ambiciosas propuestas de Bruselas, como extender hasta 2050 la obligación de las comercializadoras de energía de ahorrar anualmente el equivalente al un 1,5% de su facturación o aportar esa misma cantidad a un fondo con el que acometer medidas de eficiencia, ha quedado eliminada y sometida a una evaluación que tendrá lugar pasado 2020.
Igualmente está en el aire la propuesta de que la energía producida en los propios edificios con renovables se pueda computar como ahorro energético.
Contadores individuales
La Comisión planteaba que los contadores individuales de calefacción dispusiesen de un sistema de lectura remota en todos los edificios nuevos a partir de 2020 y en todos los existentes a partir de 2027, pero los estados han decidido retrasar este último hito a 2028.
La obligación de instalar contadores individuales en las calefacciones comunitarias ya está en vigor, pero recibe muchas críticas por la heterogeneidad de su trasposición en los distintos estados y la Comisión ha decidido elaborar unos criterios comunes; España, que todavía no ha traspuesto esa disposición, ha decidido esperar a conocer los resultados -no se esperan antes de 2018- y quizá la acometa por fases para evitar que se produzcan subvenciones cruzadas entre distintos consumidores.
Nuestro país, en respuesta a las quejas de la Comisión, va a promulgar un decreto que elimine la exención de dotar de certificación energética a los edificios y monumentos protegidos. Habrá que hacer una evaluación y sólo se librarán aquellos en los que una mejora de la eficiencia produzca una alteración inaceptable.
Por otro lado, alguna autonomía está pidiendo tiempo para remitir al Ministerio las auditorías energéticas -unas 13.000 en total- que les han presentado las empresas.