
Repsol ha alcanzado un acuerdo para la venta de una cartera de activos de generación distribuida en Francia a la compañía francesa Altarea por 140 millones. Estos activos son parte de los proyectos adquiridos en 2023 al fondo Asterion Industrial Partners, cuando compró una cartera de 7.700 MW de activos renovables en España, Italia y Francia.
Los activos franceses se agrupan en Prejeance Industrial, empresa de generación distribuida renovable, que incluye 42 MW en operación, otros 40 MW en construcción y 400 MW en diversos estados de desarrollo en más de 1.500 proyectos.
Repsol, que actualmente cuenta con aproximadamente 3.000 MW de capacidad instalada, continúa reforzando su negocio de generación renovable e invertirá entre 3.000 y 4.000 millones de euros netos para desarrollar orgánicamente su cartera global de proyectos y alcanzar entre 9.000 MW y 10.000 MW de capacidad instalada en 2027.
Fundada en 2019, Prejeance Industrial es una empresa especializada en el desarrollo de pequeños y medianos proyectos fotovoltaicos sobre tejado (entre 100 y 500 kWp ), principalmente en naves agrícolas, con un equipo de 18 empleados.
Altarea es una compañía francesa líder en transformación urbana con bajas emisiones de carbono, con una completa oferta inmobiliaria. El grupo dispone de la experiencia y las marcas reconocidas necesarias para diseñar, desarrollar, comercializar y gestionar productos inmobiliarios a medida.
Repsol cuenta con una cartera de activos renovables de 60 GW, que servirán para garantizar su objetivo de alcanzar 6 GW de capacidad instalada en 2025 y 20 GW en 2030. La compañía ha recibido también muestras de interés de Aramco para incorporarse al capital de su filial de renovables.
Otras operaciones en marcha
La petrolera trabaja en estos momentos en varias operaciones más. Por un lado, Repsol negocia una fusión de su negocio británico con Neo Energy en una operación que permitiría incrementar la producción en la zona. Asimismo, la petrolera negocia la incorporación de socios a algunos de sus grandes activos de exploración y producción en Estados Unidos como método para acelerar el crecimiento, un sistema similar al que está llevando a cabo con el negocio de renovables. Concretamente, Repsol y su socio australiano Santos buscan un socio para impulsar tres de los mayores yacimientos descubiertos en Estados Unidos en los últimos 30 años. Ambas empresas, están trabajando para vender conjuntamente una participación minoritaria de Pikka, junto con participaciones parciales en los yacimientos de Horseshoe y Quokka, situados en la región de North Slope en Alaska.
La compañía trabaja también en la venta de una participación minoritaria del campo petrolífero de Eagle Ford con Scotiabank en un acuerdo que podría valorar los activos en hasta 2.000 millones de dólares (1.866 millones de euros) y en el que la petrolera se desprendería de hasta el 49%, es decir, 914 millones de euros. De hecho, Repsol ha llevado a cabo una desinversión por 120 millones de terrenos en la zona de Eagle Ford durante el primer trimestre del año.
Repsol está valorando a su vez la salida de Noruega, que no parece prioritario en este momento para la empresa. Repsol Norge AS no estaría dentro de estas regiones clave para la española. Eso sí, el negocio produce cerca de 30.000 barriles diarios de petróleo, en campos como Yme, el principal para el negocio de la compañía en el país. La venta de su negocio en Noruega estaría dando sus primeros pasos, pero es una posibilidad que la firma está valorando con un asesor.