
Alemania prepara la billetera para desarrollar su industria del hidrógeno. La Comisión Europea aprobó este viernes un plan de ayudas por el que Berlín desembolsará 3.000 millones de euros para la construcción de una Red Central de Hidrógeno. La inversión contempla la reutilización de los gasoductos existentes para el transporte de hidrógeno, y la construcción de nuevos gasoductos de hidrógeno y estaciones de compresión. Según la nota remitida por Bruselas, el primer gran gasoducto estará operativo a partir de 2025, mientras que la finalización de toda la red se prevé para 2032.
La construcción y explotación de la red serán financiadas por los gestores de redes de transporte de hidrógeno, que serán seleccionados por la agencia federal alemana de redes, llamada Bundesnetzagentur. La ayuda adoptará la forma de una garantía estatal que permitirá a los gestores obtener préstamos más favorables para cubrir las pérdidas iniciales en la fase de puesta en marcha.
El país es uno de los mayores consumidores europeos de hidrógeno, principalmente gris. En la Estrategia Nacional del Hidrógeno, el Gobierno Federal esperaba que se necesitasen entre 95-130 TWh de hidrógeno hasta 2030. No obstante, Alemania carece de unos precios competitivos para el desarrollo de hidrógeno renovable en comparación con otros socios europeos.
Según los cálculos de Bruegel, el coste del hidrógeno en países como Alemania es el doble que en España: de 5,8 euros por cada kilogramo de hidrógeno (euros/kg) en España a 11,62 euros/kg en Alemania. Una diferencia que se repite con otros países de Centroeuropa.
Planes de desarrollo
El Gobierno alemán presentó el pasado noviembre las proyecciones de la que será la red principal de Alemania para el combustible de hidrógeno, que se extenderá a lo largo de 9.700 km y costará unos 20.000 millones de euros para 2032, según Thomas Goessmann, el presidente del operador del sistema de transmisión FNB Gas (la asociación de empresas suprarregionales de transporte de gas).
Los gasoductos existentes constituirán el 60% de la red, que conectará puertos, industria, instalaciones de almacenamiento y centrales eléctricas, explicó Goessmann, en una rueda de prensa en la que presentó los planes de la red junto al Ministro de Economía, Robert Habeck.