
La consultora JLL acaba de presentar un profundo análisis sobre la implantación de sistemas de almacenamiento standalone (aislado) en el mercado eléctrico español. En opinión de la compañía, España se ha convertido en un mercado muy atractivo para la inversión y se espera un crecimiento rápido así como un auge de las operaciones corporativas. Según los datos de Red Eléctrica, en estos momentos existen 15 GW de proyectos de almacenamiento que han solicitado acceso a la red y, al menos, 2,2 GW han logrado ya los permisos de acceso necesarios.
Para el primer semestre del año próximo, JLL estima un capex de 1,05 a 1,2 millones de euros para una instalación aislada (BESS) capaz de almacenar 4 horas (53% baterías, 38% el EPC y 9% seguros, tasas y desarrollo), el modelo más probable según las previsiones del Perte lanzado por el Gobierno para repartir hasta 150 millones en ayudas al sector.
Los precios se beneficiarán de la fuerte caída del litio carbonatado cuya cotización ha bajado desde los 66.000 dólares/mt de septiembre de 2022 a cerca de 30.000 dólares/mt en septiembre de 2023.
El almacenamiento está llamado, por lo tanto, a convertirse en una tecnología para gestionar la intermitencia de las energías renovables y la integración en la red. Se espera que el mercado mundial de almacenamiento en baterías crezca de forma muy significativa dominado por los BESS a escala comercial.
El PNIEC español prevé unos 9 GW de proyectos BESS para 2030, a los que habría que añadir los 9,5 GW de bombeo y los 3,5 GW de la termosolar con los que poder mejorar la integración de las renovables.
Las grandes diferencias técnicas entre los BESS y los activos de generación renovable requieren un cambio de mentalidad y una revisión de los modelos de negocio, concluye JLL.
A pesar de algunas incertidumbres y ajustes necesarios existe la normativa necesaria para permitir un mercado independiente en España pero JLL sostiene que todavía se deben actualizar varios procedimientos de operación por parte de Red Eléctrica y desarrollar un mercado de capacidad.
Desde abril de 2021 en el que el Ministerio de Transición Ecológica lanzó para consulta pública la orden que los regulaba apenas se han dado pasos en este sentido.
La semana pasada el Ministerio sacó a consulta pública la Propuesta de Resolución para fijar los valores del valor de carga perdida y el estándar de fiabilidad, un paso previo necesario para la aprobación.
Según fuentes del Ministerio de Transición Ecológica consultadas por elEconomista.es, la intención del Gobierno es revisar el borrador de orden de mercados de capacidad para introducir un mayor peso a sistemas de flexibilidad, tal y como se recoge en la reforma del mercado eléctrico que se está tramitando en Bruselas.
La reforma europea incluye también la elaboración de un informe en un plazo de tres meses de los pasos necesarios para aprobar dichos mecanismos de capacidad, ya que en estos momentos resultan un proceso lento.
Operaciones corporativas
El sector del almacenamiento está además a punto de cerrar su primera operación corporativa. JLL está asesorando ya a una empresa para levantar el capital necesario para sus instalaciones. La consultora asegura que ha observado mucho interés por parte de fondos, eléctricas, traders y empresas dedicadas al almacenamiento de energía y considera que se verán operaciones similares en el corto plazo.
JLL añade además que se está produciendo la llegada de jugadores de otros mercados como Reino Unido que ya cuentan con experiencia en este tipo de sistemas para poder desarrollarlos en el mercado español.