Los ministros de Energía y Medio Ambiente de la Unión Europea celebrarán la próxima semana en Valladolid una reunión clave para avanzar en la reforma del mercado mayorista de electricidad.
La intención del Gobierno español es que en dicho encuentro se pueda alcanzar un acuerdo sobre el texto de la Comisión que hay sobre la mesa para poder llevarlo al primer Consejo Europeo de la Presidencia española entre el 17 y el 19 de julio que se celebrará en la capital castellanoleonesa.
Si finalmente se alcanza este acuerdo, la intención es que se pueda llegar a los trílogos el próximo mes de septiembre para alcanzar su aprobación a finales de este año.
Negociación política
La tramitación, entretanto, sigue avanzando. Ayer volvieron a reunirse los europarlamentarios responsables de la medida por quinta vez para alcanzar un acuerdo en materias que siguen pendientes como los contratos por diferencias, los PPAs, el ahorro energético, las medidas de activación en caso de crisis y el tope de ingresos.
Antes de celebrarse estas discusiones, una coalición de grandes compradores de energía entre los que figuran European Aluminium, Eurometaux, la European platform for corporate renewable energy sourcing y Cepi han remitido una carta, a la que tuvo acceso elEconomista.es, en la que plantean algunas reformas necesarias para la industria.
Las patronales piden que se simplifiquen las cosas para facilitar el desbloqueo de los PPA corporativos. Las nuevas obligaciones de información que prevé la propuesta harán que este tipo de contratos se conviertan en una carga para las empresas de todos los tamaños y que se creen nuevas barreras.
Esta situación lograría exactamente lo contrario de lo que quieren Bruselas para crear un soporte específico que aborde los obstáculos que enfrentan los consumidores para desbloquear todo el potencial de estos contratos a largo plazo.
Los consumidores de energía, indican, no requieren nuevas obligaciones (base de datos de la UE), plataformas de negociación de PPA obligatorias o contratos estandarizados en la legislación. "Es intrínsecamente contradictorio que los formuladores de políticas quieran promover los PPA como una herramienta de mercado mientras que al mismo tiempo buscan volver a regular" aseguran en la carta. Las empresas necesitan la libertad para poner en marcha las estrategias de adquisición que mejor se ajusten a sus necesidades energéticas. Por ese motivo insisten en que hay que despejar el camino para todas las rutas al mercado de energía renovable: PPA, proyectos comerciales o los contratos voluntarios por diferencia (CfD) y juegan su papel en la construcción de nueva capacidad renovable.
La transparencia no es una barrera para los PPA corporativos ya que incluyen el nivel de riesgo financiero en la firma de un contrato a largo plazo o el marco normativo nacional, o los costes de configuración y consolidación. La industria reclama también acabar con las medidas de emergencia y aplicar la prudencia necesaria ya que la medida no cuenta con un informe de impacto.
