
Iberdrola, a través de su filial Neoenergia, se lanza junto con el fondo soberano de Singapur (GIC) a por una parte de un pastel de 3.000 millones de euros de inversión en redes de transmisión en Brasil.
Ambas compañías participarán conjuntamente en la subasta que se llevará a cabo este viernes para hacerse con hasta nueve lotes de redes repartidos en siete estados (Bahía, Espirito Santo, Minas Gerais, Pernambuco, Río de Janeiro, Sao Paulo y Sergipe).
El Gobierno brasileño ha abierto esta semana la convocatoria para los interesados y tras la subasta espera firmar los contratos definitivos para los ganadores el próximo mes de septiembre.
La previsión del Gobierno de Lula da Silva es que se construyan un total de 6.184 kilómetros de nuevas redes de 400 MVA en un plazo de entre 36 y 66 meses, lo que se estima puede provocar la creación de hasta 29.300 empleos directos.
La alianza de Iberdrola con el fondo de Singapur facilitará a la española un acceso más rápido a fondos que permitirán acelerar el crecimiento de la compañía en el negocio de redes en el país. De hecho, Iberdrola llegó el pasado mes de abril a un acuerdo con GIC, tal y como adelantó elEconomista.es, para darle entrada en su negocio de transmisión con un 50% del capital de la sociedad que gestiona dicha área en Brasil.
Al mismo tiempo, ambas compañías sellaron también un acuerdo de derecho a adquisición preferente (ROFO) para una participación del 50% de otros activos en construcción y operación (Itabapoana, Guanabara, Vale do Itajaí, Lagoa dos Patos, Morro do Chapéu, Estreito, Alto do Parnaíba, Paraíso y Potiguar Sul), que engloban 6.279 kilómetros y que se podrá ir materializando conforme estos activos finalicen su construcción hasta 2029, lo que permitirá a la española reciclar capital invertido en los mismos.
Una vez ejecutada la operación, la filial de Iberdrola en Brasil, Neoenergia, dejará de consolidar la deuda de los activos operativos, considerados dentro del perímetro de la transacción.
En los activos que puedan ganar ambas empresas en esta próxima subasta, Iberdrola controlará un 60% y GIC un 40% hasta el momento de la construcción en el que se transferirá el activo a la sociedad que mantienen al 50%, lo que en la práctica supone un incentivo para la compañía para acelerar la construcción de los mismos.
Permisos
Por otro lado, el pasado 20 de junio, la Comisión Europea recibió la notificación oficial de la propuesta de concentración por la que Warrington Investment Pte. Ltd pretende adquirir, junto con Neoenergia S.A. el control conjunto de Neoenergia Transmissora 15 SPE S.A.
Warrington es un vehículo de inversión nominado de GICSI. GICSI gestiona una cartera global diversificada de inversiones en capital privado, capital riesgo e infraestructuras, así como inversiones directas en empresas privadas.
El Grupo objetivo comprende una serie de sociedades con fines especiales que operan en el mercado de transmisión de electricidad en Brasil mediante concesiones. La operación, que se lanzó el 12 de octubre de 2022, cuenta con el asesoramiento de JP Morgan e Itaú.
Esta transacción se enmarca en el programa de rotación de activos no esenciales de Iberdrola, que de este modo ya ha cumplido al 100% apenas unos meses después de lanzar su plan estratégico y que permitirá apoyar el plan de inversión récord de 47.000 millones de euros.