A las 16.00 horas de una apacible tarde de mayo y con vistas a la playa artificial de Maasvlakte (Países Bajos) un ciclista entrena sin esfuerzo entre aerogeneradores, contenedores, canales y plantas petroquímicas en declive mientras un autobús con periodistas europeos se detiene a los pies de una obra. En Maasvlakte 2 -el nuevo puerto e infraestructuras construido en terrenos ganados al mar- Shell trabaja sobre el terreno para construir la mayor planta de hidrógeno renovable de Europa que entrará en funcionamiento en 2025. El electrolizador de 200 MW producirá hasta 60.000 kilogramos de hidrógeno renovable al día.
En el Puerto de Róterdam se dan cita el Antiguo Régimen energético y el nuevo, basado en renovables. Según los datos del gestor, en la zona portuaria hay turbinas eólicas con una capacidad combinada de unos 300 MW, incluidas 22 turbinas de Eneco, que se instalaron en el dique Maasvlakte 2 a finales de 2022 con una capacidad combinada de 116 MW. Además, un número cada vez mayor de edificios, especialmente almacenes de distribución, están equipados con paneles solares. Las posibilidades de instalar capacidad de generación adicional en la zona portuaria son limitadas. De aquí a 2030, en el Mar del Norte deberán instalarse aerogeneradores con una capacidad de 21 GW. De ellos, se prevé que 7,4 GW aterrizará en el Puerto de Róterdam.
En una extensión de más de 40 kilómetros sin esclusas ni puentes -lo que supone una ventaja competitiva para dar la bienvenida a buques de gran tamaño- el mayor puerto del continente y el cuarto del mundo camina en la buena dirección para convertirse en el Centro Europeo del Hidrógeno.
En Maasvlakte 2 varias compañías tienen previsto construir plantas de hidrógeno verde con una capacidad de 200-250 MW cada una. Además de Shell, BP y HyCC (H2-Fifty) y Air Liquide (CurtHYL) están desarrollando sus planes. Al agrupar las plantas, pueden utilizar instalaciones comunes, como conexión eléctrica, suministro de agua y conexión a la nueva tubería de hidrógeno. Uniper también tiene previsto producir hidrógeno verde junto a su actual central de carbón de central eléctrica de carbón de Maasvlakte.
El pasado abril se reservó un terreno de 11 hectáreas reservado para un electrolizador de hasta 1 GW para el adjudicatario de la licitación del parque eólico IJmuiden. Esta licitación promueve la "integración de la energía eólica en el sistema energético". La producción de hidrógeno directamente en la costa es una solución lógica, ya que evita carga adicional en la red terrestre de alta tensión. Una planta de esta capacidad debería convertirse en la próxima generación de plantas ecológicas de hidrógeno.
Papel clave
La ciudad neerlandesa acogió la semana pasada el Congreso Mundial de Hidrógeno donde se puso de manifiesto el papel clave está jugando como epicentro de esta tecnología. La ambición de la Autoridad Portuaria es alcanzar de 2 a 2,5 GW de electrólisis para 2030.
Para conquistar esta meta, el gestor portuario trabaja para crear un ecosistema de hidrógeno verde: desde el desembarco de electricidad verde procedente de los parques eólicos del Mar del Norte, la producción, el desarrollo de terminales de importación, vehículos portadores y la creación de cadenas de importación e infraestructuras entre el Puerto de Róterdam y los clústeres industriales de Países Bajos y Alemania. Además de la construcción del gran electrolizador de Shell, también hay una terminal de amoniaco en proceso de triplicar su capacidad y se han entregado las tuberías para el gasoducto de hidrógeno que serán instaladas por Gasunie -el distribuidor de gas neerlandés- y de las que la petrolera angloneerlandesa será el primer cliente.
En el marco de este congreso, la española Cepsa y la suiza Getec comunicaron un acuerdo para suministrar hidrógeno verde a Europa a partir de 2026 a través del Puerto de Róterdam. Asimismo, Arabia Saudí y los Países Bajos firmaron un memorando de entendimiento para colaborar en el desarrollo de la energía verde y el hidrógeno. "Róterdam sería nuestro hub hacia Europa", señaló el ministro saudí de Energía, el príncipe Abdulaziz bin Salman.