
La industria automovilística europea podría sufrir una caída de hasta el 15% en la producción de vehículos ligeros por culpa del racionamiento energético de este invierno, según un informe de análisis de escenarios que acaba de elaborar S&P Global Ratings.
Según los datos de S&P Global Ratings, aproximadamente la mitad de las importaciones de gas rusas (140 bcm de gas canalizado el año pasado; el consumo total de la UE es de 450 bcm) se cubrirán con suministros alternativos, como el GNL, lo que dejaría un déficit de unos 70 bcm.
De ellos, según las previsiones de esta entidad, una cantidad desproporcionada podría recaer sobre la industria europea, incluidos los fabricantes y proveedores de automóviles, dado que los consumidores de muchos países gozan de fuertes protecciones contra los recortes obligatorios en el uso de la energía.
Un tercio del recorte del 15% previsto por la UE (aproximadamente 23 bcm) recaería sobre la industria, aunque esta cifra podría variar en función de las asignaciones que adopten los gobiernos nacionales.
"Hemos considerado dos escenarios para la parte prevista de la industria automovilística europea de los 23 bcm de ahorro total de gas: el 10% y el 5%. Consideramos que el escenario del 5% es más realista, ya que el caso del 10% implicaría una contribución del sector superior a su cuota de consumo total de gas industrial", dijo Vittoria Ferraris, analista de crédito de S&P Global Ratings.
"Estimamos que por cada bcm de racionamiento de gas que tenga que absorber la industria automovilística europea, la producción de automóviles tendría que reducirse entre 800.000 y 900.000 unidades en nuestro escenario principal de racionamiento. 9 millones de unidades en nuestro escenario principal de 10 MWh por vehículo. Utilizando estos supuestos, estimamos un riesgo de producción del 7% en el escenario del 5% y del 15% en el del 10%, respectivamente, sobre la base de los vehículos ligeros producidos en Europa en 2021", concluyó Ferraris.