
Viajar con un seguro de cobertura sanitaria es indispensable ya que un traspié fuera de nuestro país puede acabar convirtiéndose en una auténtica pesadilla por los altos precios de la atención sanitaria en el exterior.
Para visitar países miembros de la UE, además de Lichtenstein, Noruega, Suiza e Islandia sólo se necesita portar la Tarjeta Sanitaria Europea, que garantiza la cobertura en estas naciones como si fuese un ciudadano más del país. Este documento se expide en las oficinas de la Seguridad Social, y también puede solicitarse a esta misma entidad a través de su página web. Puede utilizarse por motivos de viaje de placer, etapa de estudios o desplazamiento profesional indistintamente, pero no si el motivo del viaje es en sí mismo la cita sanitaria.
En el caso de pasar las vacaciones en destinos más allá de Europa, resulta imprescindible contratar un seguro, especialmente si se visita EEUU o Japón, donde la asistencia sanitaria es prohibitiva. Para estos escenarios, se recomienda que el seguro adquirido cubra 60.000 euros en gastos médicos, y basta con un cobertura de 30.000 euros en el resto de destinos.
En algunos países, como Rusia o algunas antiguas repúblicas soviéticas, la acreditación del contrato de un seguro es un requisito para la tramitación del visado.
Puede que ya tengas seguro sin saberlo
Antes de contratar un seguro de viajes, resulta importante averiguar si ya tenemos uno. Es decir, algunas coberturas sanitarias nacionales o algún paquete de seguros de hogar o del coche pueden incluir algún tipo de acuerdo que garantice la asistencia en el extranjero. Seguros privados sanitarios contratados en España pueden ofrecer un servicio específico para viajes. Es recomendable revisar el seguro del coche, que también suele incluir cobertura en viajes tanto para el asegurado como para sus familiares, aunque no viajen en el vehículo.
Las tarjetas de crédito también pueden ofrecer cierta cobertura de asistencia sanitaria en viajes, aunque conviene revisar los términos porque suele ser más limitada. Los seguros de hogar suponen otro ejemplo: revise su contrato porque es probable que tenga ya una cobertura de este tipo.